Somos una familia comepollas (Violet Monroe)

Esta es la escenificación del sueño de cualquier hombre al que la sangre le pide follar sin parar. Encontrarse en la casa de su novia, presumiblemente una madurita de buen ver y mientras esta no está en casa que su hija, una jovencita potente y apetitosa se te insinúe en la cocina y te acabe chupando la leche.
La frase final de ella es: ¡Somos una familia comepollas!
Mientras saborea la leche de la polla que se acaba de comer.